Radicado en el Partido de La Costa hace casi treinta años, Toro es un periodista de amplia trayectoria en el distrito. «Un buen día me senté en la máquina y dije ‘Voy a escribir la historia de mi vida’, porque mi vida tiene tantas anécdotas que podés hacer una telenovela. Me senté, empecé a escribir y de pronto los personajes me empezaron a contar una historia, y yo como buen periodista recogí las historias y las traduje al libro y así empezó todo esto», contó el autor.
«Lo escribí hace 10 años, hay una cantidad de libros que son secuelas de éste. O sea que hay producción para rato, pero en este primer libro empiezo a descubrir sentimientos que uno tiene», explicó y agregó: «Cuando vas envejeciendo te das cuenta que cuando más sabes es cuando menos podés aplicar tus conocimientos. Cuanto más sabés de comidas, no podés comer por el colesterol. Cuanto más conoces de sexo, menos posibilidad tenés de ejecutarlo, y así con un montón de duelos. Entonces la pregunta es por qué tenemos que ser castigados en terminar la vida con un cuerpo que se va arrastrando, con piernas que no quieren caminar, con ojos que no quieren ver, si hay elementos para vivir bien. Porque los laboratorios no te curan, te mantienen vivo simplemente porque es el gran negocio, pero no te curan porque se terminaría ese negocio. De todo esto tiene que ver esta primera novela».
«Toda la vida les enseñé a mis hijos que hay que trabajar desde el minuto que llegás hasta el minuto en que te vas. Y en mi vida es así, yo creo que me voy a morir trabajando, haciendo lo que puedo porque ya hay muchas cosas que no puedo hacer, pero mientras tenga vida voy a seguir produciendo», señaló el autor de «La píldora de Eros».