Dicen que no es sano mantener viva la tristeza, pero cómo exiliarla si fue tan dura la realidad padecida que aprendimos a sobrevivir exonerando al silencio,
apelando a la fuerza de los distinos matices de voces tragadas en las noches más cruentas por aquella vergüenza estampada en las páginas de una historia gestada a plomo y picana, a violación sistemática. a gritos de impotencia, bronca, de dolor y ausencias para siempre.
Aprendimos a sobrevivir cuando cada mañana pasó a ser un interrogante:
-¿Quién estará?, - ¿Quién falta?- ¿Adónde se lo llevaron? fueron arrastrados por el camino espinoso del martirio en tan vasta y hermosa geografía Sudamericana por donde pasara el Cóndor de plumaje verde olivo en vuelo raudo, rasante, desgarrándole las vísceras al tiempo.
¡Ay niña mía anclada para siempre en este corazón que ya late débil, ¿Cómo hablarte del dolor que se aferra en esta fecha negándose a estancar en el olvido?
En mis letras la memoria se agita y la conciencia se yergue enardecida dándome un soplo de vida y de coraje.
En estos días el recuerdo se puebla de voces que ayer fueron queridas mientras una tibia llovizna recorre lenta la ladera ajada de mis mejillas
y no llueve…
Y hoy, a tantos años del despojo, de ese odio feroz, encarnizado, seguimos exigiendo desde lo más profundo de nuestros corazones:
MEMORIA, VERDAD, JUSTICIA.
NO HAY LUGAR PARA EL PERDÓN, LA RECONCILIACIÓN NI EL OLVIDO
¡PORQUE FUERON 30 MIL LOS ARRANCADOS. FUE GENOCIDIO!!
Homenaje a mis hermanos y hermanas desaparecidas a 49 años del Golpe Militar que enlutara la patria y se llevara tantos sueños.
No hubo DOS DEMONIOS, HUBO UNO SOLO egresado de la escuela del crimen aberrante, tragándose todo pero nunca ¡La esperanza!
25-3-25 Nechi Dorado